Los pibes no se habían ni enterado de la ola de calor, de los cuarenta y tanto que se pronosticaban para la tarde carnaval. Que ese febrero de entrados los 80’ iba a batir récord. Esos niños, algunos preadolescentes, sólo los convocaba el fútbol, allí en la canchita de Cardema, uno de los últimos potreros que los baigorriense tuvimos en el extremo oeste de barrio San Miguel, y que supo sobrevivir hasta plena década de los 90’.
Allí en esas partidas de múltiples campeonatos, un flaquito, de voz aflautada, de rodillas huesudas, soñaba un sueño del cual no quería y ni debía despertar. Subido a una lomita, bajo las sombras diáfanas de los eucaliptus, el muchachito de tez morena relataba esos encuentros deportivos, en una mezcla entre Víctor Hugo Morales y José María Muñoz, buscando en el horizonte las luces del Monumental de River o la Bombonera.
Fernando Bravo, el relator de mayor crecimiento profesional de los últimos tiempos en la radiofonía rosarina, era y será para siempre Pipi para la pibada de Baigorria que compartió atardeceres al fragor de fulbitos imperdibles.
“En el secundario había profes que me pedían que relatara algún picadito que se hacían en el patio de la escuela”, recuerda el periodista cuando en medio de su arduos días de trabajo se detiene unos minutos para contar cómo y por qué hoy es casi una marca registrada en la radio rosarina.
Pipi arrancó de joven en los medios. Estudios centrales en las transmisiones de fútbol, vestuarios en partidos del ascenso, hombre de campo en la B Nacional o en el Federal, productor general de coberturas periodísticas, hasta poder llegar a relatar un partido. El baigorriense si que sabe pagar ese bendito derecho de piso que supuestamente debemos abonar los comunicadores.
Pero Fernando en vez de amilanarse y detener su pasión, el haber estado en cada escala del periodismo deportivo lo hizo ser un conocedor de la cosa, saber la cocina de las transmisiones futbolísticas, manejar los pormenores, deducir pros y contras.
En 2010 se sumó a trabajar con Pablo Gavira tanto en radio como en tele. En 2012 supo hacer notas para Canal 3 de Rosario y ser el segundo relator en Radio Del Plata en Rosario, todo bajo la dirección del periodista rosarino. Pero en 2015, cuando la emisora cambió de dueños y dial, llegó la propuesta tan deseada.
“Los nuevo directivos de la radio me dijeron si quería hacerme cargo del fútbol y una tira deportiva diaria. Era algo nuevo para mí, porque siempre había trabajado para otros, nunca había estado a cargo de todo. Fue un desafío, armar un equipo de trabajo, convocar a periodistas y darle forma al nuevo emprendimiento. Pero al final todo salió bien. Ya hace tres años de aquello y hoy estamos más firmes que nunca”, revela Bravo.
Fernando era relator de Del Plata Rosario cuando fue el envite. Sabía de los vericuetos del trabajo. Sabía desde tirar cables para las conexiones telefónicas con la radio, hasta la venta de publicidad. De armar los handis para los vestuarios, hasta los trámites para pedir una cabina en las canchas. De convocar a los periodistas para cada jornada hasta la cantidad de mili segundos que se deben esperar antes cantar un gol desenfrenadamente.
“Fui hablar con varios amigos. Les conté del proyecto de Radio Del Plata. De las transmisiones y la tira. Y allí arrancamos”, dice Pipi, quien de lunes a viernes de 14 a 16 conduce Una Buena Tarde por la FM citada. A su vez cubre todos los partidos de Newell’s y Rosario Central. “Nosotros no transmitimos los partidos mirándolos por la tele. Viajamos y vamos a la cancha, sea donde sea”, dice el periodista orgulloso de sus compañeros por el esfuerzo cotidiano.
Eléctrico como es, Fernando empezó a posicionarse como un gran narrador de fútbol, una especialidad en el periodismo que parece estar en extinción. A diferencia de los años mozos de Pipi, hoy los jóvenes que llegan a instituciones educativas para estudiar, o se acercan a una radio a trabajar, no se aventuran al relato. Antes era normal consultar en una escuela de periodismo qué rama de la profesión iban a inclinarse, y el relato era uno de los más elegidos. Hoy no lo es.
Su voz clara y articulada. Su fraseo y mirada de la contienda. La visión periférica que se debe tener para la labor, son condiciones favorables para el baigorriense. “No me cuido tanto la voz, lo que sí estoy muy actualizado en todo el mundo deportivo”, dice el periodista.
Su labor diaria, multifuncional, se inicia muy temprano. Para estar a cargo de una producción de esa envergadura hay que meter muchas horas de laburo. “Yo no paro de trabajar. Subo al auto y voy a visitar clientes, cobrar pautas, o me reúno con otros periodistas o jugadores o con gente que te pasa data para el trabajo cotidiano. Es mucho, pero lo hago feliz porque es lo que sé hacer, para lo que me preparé y siempre luché”, afirma.

Fernando, junto a Walter Hugo y Eduardo Luis

La meta para Pipi es el crecimiento como persona y profesional. Eso hizo que siempre haya buscado lo mejor para dar a los oyentes, esa comunidad fiel que sigue al periodista cada día más.
Una vez que logró formar el equipo de trabajo inició otra locura. La de poder sumar voces reconocidas de la radiofonía de Rosario. “Sabía que Eduardo Luis no estaba en ninguna radio así que en 2016 lo invité a sumarse a nuestro espacio. Y aceptó. Fue para mí un orgullo, por lo que significa él para el relato y la radio”, confiesa Fernando.
A finales del 2017 Bravo consiguió otro deseo anhelado: sumar a sus transmisiones a Walter Hugo García Da Rosa. El relator uruguayo, que por años fue parte del equipo deportivo de LT3, se sumó a las trasnmi de Radio del Plata. “Lo de Walter Hugo fue similar a lo de Eduardo, sabía que había terminado el contrato con LT3 y también lo convoqué. Todos los que se sumaron a nuestro emprendimiento lo hicieron sabiendo que esto es un laburo serio, sin ninguna ventaja. La idea es hacer un buen producto y que todos terminemos satisfechos”, manifestó.
Es de aclarar que Fernando cuenta en su plantel de profesionales a los periodistas, Hernán Cabrera, Chino Odíseo, Román Fiori, Edgardo Bozikovich, entre otros. A su vez está en televisión con su programa “Rivales” los martes a las 21 por TV Regional, canal 19 de Cablevisión.
En la cancha de las igualdades, Pipi seguirá contándonos gambetas y jugas épicas. Él sabe de partidos perdidos por goleada, esos que la vida nos tiene preparados para crecer. En ese mientras tanto, el pibe de San Miguel sigue soñando en relatar un partido, ese que con gol de Lionel Messi, Argentina sale campeón del mundo.