La concejala Antonella García afirmó que el decreto municipal que restringe la venta de materiales de construcción a ciertos barrios de la ciudad “es discriminatorio y confuso”, y advirtió que la medida no resuelve los problemas estructurales de Granadero Baigorria. Según la edila, la gestión del intendente Adrián Maglia se ha convertido en rehén de sus propias políticas y del abandono histórico de algunos barrios.
García sostuvo que la falta de planificación y la ausencia del municipio en sectores como Remanso Valerio, Espinillo, Caminito y Virgen del Rocío generaron una situación que el Ejecutivo intenta corregir de manera abrupta mediante el decreto. “La realidad es que mucho de lo que pasa en los barrios, incluso en aquellos históricos, es responsabilidad del abandono del Estado. Y ahora responsabilizan a los vecinos y comerciantes de problemas que el gobierno municipal ha generado en más de 10 años de gestión”, afirmó.
La concejala recordó que algunos barrios cuentan con infraestructura básica, como jardines y centros de salud, y que familias históricas viven allí desde hace generaciones. “No estamos hablando de nuevos asentamientos ni de tierras fiscales tomadas recientemente. Son barrios con identidad cultural que han crecido de manera desordenada por la falta de presencia del Estado”, indicó.
García denunció que el decreto recae sobre los comerciantes de la construcción, obligándolos a discriminar entre vecinos, mientras los verdaderos responsables, según su criterio, son las políticas de gobierno que priorizan medidas asistencialistas y de corto plazo. “Aprovechan la situación económica y la falta de planificación para generar beneficios políticos, en lugar de desarrollar soluciones estructurales para la ciudad”, sentenció la legisladora.