Aunque nadie lo diga la mesa chica del magliaismo tiene casi definido el nombre de quien encabezará la fórmula a concejales para el 2025. Como es sabido, y se ha repetido en estas páginas, el año entrante la ciudad sólo elige 3 concejales de siete, por eso para el oficialismo, que cumplirá 12 años al frente del Municipio, se le puede complicar renovar la banca propia, en manos hoy del presidente del cuerpo Mario Rosales.
Ahora bien, se sabe, y está casi confirmado, que la alianza entre el antonellismo y La Colmena, que hizo que la joven concejala Antonella García casi ganara la intendencia y que resultara electo el edil, Adrián Milo Cravero en el 23’, no correrá para las elecciones de medio término. Esto debilita al sector de la oposición para disputarle el poder al viejo militante peronista Adrián Maglia.
A su vez la todavía no cerrada determinación de otra peronista, Eliana Trivisonno, también abona para que el magliaismo aspire a renovar el escaño y proyectarse otro mandato en el 2027, obviamente ya sin el intendente Maglia.
Es de aclarar que Eliana sí competirá por una banca, lo que no se sabe es dónde lo hará y con quién. Sí en interna en el antonellismo o con los colmeneros, o sola en una lista distrital.
Por su parte ese corsito que es Unidos, que, como ya se dijo en otros textos y videos de este periodista, es un cachivache donde radicales, socialistas, evangélicos, macristas, libertarios, se entremezclan sin ponerse colorados, también está en veremos.
Unidos tiene sólo dos candidatos potentes. El concejal Javier Minetti, quien debe renovar el año entrante y el edil mandato cumplido Guillermo Da Ponte. Los demás, no tienen peso electoral, algunos por recién llegados al ruedo político, como los evangélicos de Uno, y otros, como el caso del siempre tercero, y a veces cuarto, Víctor Bocco, con pocas fuerzas en las urnas.
Con este panorama, el magliaismo está competitivo. Tan vivo, como cuando se le dio la extremaunción el año pasado luego de perder las primarias, para ganar luego, y con la lengua afuera, en las generales del 2023..
El oficialismo tiene el aparato del Estado, y aunque parezca que no, tiene cosas para mostrar en tiempos de vacas flacas.
Si realmente el magliaismo quiere sobrevivir y ser una alternativa, con nombres frescos para el 27’, tiene que modificar de manera urgente su comunicación a la sociedad, planificar que quiere para el año entrante, y dale un sentido político a la gestión, cambiando al secretario de Gobierno, el afrancesado Osvaldo Aymó ,de pésima gestión que sólo se ha ocupado de multar conductores en motos de baja cilindrada o dar entrevistas sobre seguridad vial y alcohol cero.
Lucho Maglia es un gran candidato y Martín Tartarelli también. Hay qué ver si realmente piensan en el futuro y darle continuidad al proyecto político que hoy lideran, o se resignarán a entregar la municipalidad a los que ya vienen pidiendo pista.